Recientemente, la OMS ha declarado que se opone a la restricción del movimiento transfronterizo de personas, pero al mismo tiempo los gobiernos de muchos países se ven en la necesidad de tomar medidas para evitar la propagación del Coronavirus. Una de estas medidas es el control y criba de pasajeros en aeropuertos y personas en zonas de alta concurrencia mediante escaneos térmicos.

Con la cámara termográfica Testo 885 y la función especial de Fever Detection, se pueden realizar pruebas térmicas a las personas de forma muy rápida y no intrusiva, lo que evita molestias y retrasos en el movimiento de grandes multitudes. Para ello se mide la temperatura del ángulo interno del ojo y se activa una alarma cuando se detecta una divergencia. De este modo es posible reconocer personas con una temperatura corporal elevada de forma rápida y fiable, así como separarla para un control más exacto.

Para escanear de forma rápida, la cámara realiza un cálculo continuo tras unos pasos previos. Primero, se establece un umbral en el menú, que es la temperatura promedio del cuerpo humano. Luego se establece un valor límite, que puede ser el valor de fiebre 1 ó 2 grados más. Por último, la memoria de la cámara almacena 15 valores de personas escaneadas para determinar el umbral inicial. Tras estos pasos, una indicación del tipo semáforo (amarillo - persona detectada, verde - persona dentro del umbral, rojo - persona fuera del umbral) permite detectar rápidamente individuos con temperatura corporal alta.