Los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC) de las infraestructuras hospitalarias tienen un papel crítico en la prevención y control del Covid-19, según destacan organismos internacionales como los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la Sociedad Estadounidense de Ingenieros de Calefacción, Refrigeración y Aire Acondicionado (ASHRAE).
En España, el Ministerio de Sanidad del Gobierno de España recomienda que en estos casos “el manejo clínico se realice en habitaciones de presión negativa, aisladas y en la Unidad de Cuidados Intensivos. De no estar disponible este tipo de estancia se le atenderá en una habitación de uso individual con baño, con ventilación natural o climatización independiente. La puerta de la habitación deberá permanecer siempre cerrada”, según publica en el Documento Técnico sobre Manejo Clínico del Covid-19 para la Atención Hospitalaria. Medidas compartidas igualmente desde el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) de la UE.
Johnson Controls, un líder global en la creación de un mundo seguro, confortable y sostenible está ayudando a crear espacios hospitalarios que aseguran la salud y la tranquilidad de pacientes y personal sanitario en este tipo de entornos cerrados gracias a la comercialización en España de soluciones específicas para la optimización de la calidad del aire interior.
Las recomendaciones sanitarias pasan por situar a los pacientes en las denominadas habitaciones de aislamiento de infecciones transmitidas por el aire (aiir). Espacios de presión negativa individuales con un mínimo de 6 cambios de aire por hora (se recomiendan 12 para nuevas construcciones). Estas aiir proporcionan constantemente aire limpio a los pacientes y ayudan a proteger al personal sanitario de posibles infecciones. Este tipo de estancias contienen, diluyen y extraen el aire contaminado a través de un filtro de aire de partículas de alta eficiencia (HEPA) y luego lo ventilan al aire libre. La presión negativa evita que las gotas contaminadas viajen a otras áreas del hospital cuando se abren las puertas.
Las entradas y salidas deben minimizarse ya que las corrientes de aire del tráfico de personal pueden interrumpir el flujo de aire adecuado, por lo que el equipo aiir HVAC debe ser de acción rápida, adaptándose inmediatamente a las condiciones cambiantes. Las instalaciones deben monitorizar y documentar el funcionamiento adecuado de la presión negativa de las aiir, y debe haber una indicación visual constante del monitor de presión de la habitación.
Para hacer frente a esta situación crítica que están atravesando los hospitales y centros sanitarios a causa de la pandemia, Johnson Controls ofrece y comercializa en España una gama de productos y soluciones para la higienización y purificación del aire que comprende:
· Filtración de alta eficiencia. La eliminación física de partículas del aire es el primer paso para mejorar la calidad del aire interior. Johnson Controls puede proporcionar y reemplazar cualquier filtro con la última normativa mundial, ISO16890, eficaz para atrapar partículas según su tamaño y clase de filtro, entre los que se incluyen: los filtros HEPA de clase E10 hasta H14 según los estándares EN 1822: 2010, los filtros químicos como filtros de carbón activo, alúmina activada y los filtros de extracción segura (bolsa dentro-bolsa-fuera).
· Unidad de ventilación HEPA modular móvil. Nuestra unidad de ventilación HEPA modular móvil con un flujo de aire de hasta 3240 m³/h está equipada con un filtro HEPA H13 o superior y puede capturar partículas con un tamaño menor a las 0,03 micras. Convierte salas generales en salas de aislamiento de presión negativa o funciona como un purificador de aire HEPA recirculante en habitaciones y áreas de todo tipo. Opcionalmente, la unidad móvil puede equiparse con ionizadores y un sistema de desinfección UV.
· Irradiación germicida ultravioleta. La energía ultravioleta es una radiación electromagnética con una longitud de onda más corta que la de la luz visible, pero más larga que los rayos X más suaves. La energía UV-C altera el ADN de una amplia gama de microorganismos, volviéndolos inofensivos. Esta tecnología de línea de visión activa impacta en las áreas directamente expuestas a la fuente de luz. Incluye la corriente de aire directa y las superficies. La eficacia depende de la dosis de UVGI, las longitudes de onda, el tiempo de exposición y el nivel de humedad. Nuestro software de selección ayuda a tomar la decisión más correcta.
· Purificación del aire interior mediante carga eléctrica de partículas. La ionización monopolar o precipitación electrostática (ESP) funciona inundando el aire con millones de partículas cargadas negativa o positivamente para que reaccionen con microbios y contaminantes. Este método es capaz de capturar partículas de menos de 0,01 micras cargándolas eléctricamente. Las placas colectoras, que tienen carga opuesta, capturan estas partículas en el siguiente paso. Nuestras unidades de ionización se pueden instalar de forma independiente, empotradas en el techo o en unidades de tratamiento de aire y ventiloconvectores existentes.
“La transmisión aérea –por aerosoles- de enfermedades, tales como el covid-19, puede ser causada por la presencia de microbios dentro de los núcleos de las gotitas respiratorias, partículas de menos de 5 micras de diámetro que pueden permanecer en el aire durante un largo período de tiempo y pueden transmitirse a distancias superiores a un metro. Las soluciones de climatización que facilitamos desde Johnson Controls permiten disponer de sistemas de tratamiento y purificación de aire que pueden ayudar en los hospitales recogiendo esos aerosoles, filtrándolos y depositándolos en lejos de las personas”, señala José Luis Borrallo, director de la división HVAC de Johnson Controls en España.