El Ecodiseño es una directiva de la Unión Europea que establece unos requisitos mínimos que deben cumplir los productos relacionados con la energía, y que, por su diseño, ofrecen posibilidades significativas de mejorar su impacto medioambiental.
Esta directiva trata de fomentar posibles mejoras en el impacto medioambiental sin suponer un coste elevado. Para facilitar el trabajo, la directiva divide los productos en lotes. Los más representativos y que afectan a los productos de climatización y refrigeración son:
- Lote 6: aparatos de aire acondicionado y sistemas de ventilación.
- Lote 20: aparatos de calefacción eléctrica de uso local.
- Lote 21: aparatos de calefacción central de aire caliente.
En la actualidad, cada vez más marcas y empresas de todo tipo tratan de desarrollar productos y llevar a cabo acciones que fomenten la sostenibilidad. ¿Los motivos? En primer lugar, porque la preocupación de los consumidores por el impacto en el medio ambiente se ha incrementado en los últimos años y se ha convertido en un factor decisivo en el proceso de compra. En segundo lugar, porque las regulaciones institucionales son cada vez más exigentes en virtud de las evidencias científicas que muestran los efectos negativos de la contaminación y el cambio climático en el planeta.
Haverland, marca española referente en climatización, y en su compromiso con el medioambiente y la sostenibilidad, lleva aplicando esta normativa desde el 1 de enero del 2018.
Alguno de los requisitos para cumplir con los estándares del Ecodiseño y que poseen los productos de Haverland son:
- Eficiencia energética mínima: los productos diseñados bajo las señas del Ecodiseño deben cumplir con una eficiencia energética mínima para reducir el consumo y mejorar el rendimiento.
- Control de temperatura: los productos deben contar con sistemas de control de temperatura para ajustar su funcionamiento según las necesidades de cada estancia y la temperatura ambiente.
- Funcionamiento programable: los dispositivos deben incorporar sistemas de programación que permitan establecer horarios de funcionamiento, reduciendo así el consumo innecesario de energía.
- Información sobre el consumo energético: los fabricantes de equipos de calefacción y refrigeración deben proporcionar información sobre el consumo energético de sus productos.
- Limitación del ruido: los equipos tienen un máximo de decibelios establecidos que pueden producir.
Estas son solo algunas de las condiciones más importantes, pero los parámetros que se pueden incorporar en los equipos de climatización y refrigeración para hacerlos más sostenibles son múltiples y variados. “Es importante, a la hora de implantar el Ecodiseño en el proceso de fabricación, distribución y uso de cualquier producto, tratar de no comprometer factores tan importantes para el consumidor como son el precio, la funcionalidad, la calidad o la seguridad”, afirma Beatriz Márquez, directora de marketing de Haverland.
Por ello HAVERLAND, además de cumplir con estos parámetros del Ecodiseño, también pone el foco en el bajo consumo, en la calidad de los materiales para alargar su vida útil y en los sistemas de conectividad, que permiten controlar el funcionamiento y el consumo de los dispositivos mediante el teléfono, tablet u ordenador.
Otras medidas incorporadas por la marca española son el sistema de detección de ventanas abiertas, funciones de seguridad para evitar sobrecalentamientos o accidentes, y el uso de materiales reciclados y más sostenibles como el aluminio. Además, cuenta con dispositivos que incorporan la última tecnología, como sensores de presencia que hacen que los dispositivos se auto programen solos o detecten la ausencia de actividad y modifiquen la temperatura cuando el equipo no se está utilizando.