Raúl Corredera es el tercer español, tras Eloy de Sola y Francisco Muñoz Leyva, en ocupar la presidencia de Eurovent. Fue elegido el 4 mayo de 2021, en la Asamblea General Nº65 de la Asociación Europea de la Industria de la Climatización Interior (HVAC), la Refrigeración de Procesos y las Tecnologías de la Cadena de Frío Alimentaria. 

Corredera ha formado parte del Consejo de Administración, como miembro representante de AFEC desde mayo de 2019. Actualmente es el Senior Director of Production and Operation at Systemair Group y acumula más de 24 años de experiencia internacional, de los cuales 13 en el sector HVAC. 

Ya han transcurrido ocho meses de mandato desde que accedió a la presidencia de Eurovent. ¿Qué acciones ha podido desarrollar en este corto periodo de tiempo, de sus objetivos marcados en su programa trienal? ¿Qué reformas se han iniciado en las tres organizaciones que componen EUROVENT?

Desde que asumí la presidencia de Eurovent, he logrado que tener una buena calidad del aire interior haciendo un mínimo uso de la energía, sea la prioridad máxima de la organización. Su importancia ha sido algo evidente durante muchos años, el Covid-19 solo ha hecho remarcar cuan esencial es. 

Estamos también reforzando los términos de trabajo de Eurovent en materia de sostenibilidad. Como miembro del Consejo de Administración, trabajo activamente para asegurar que el sector HVAC europeo funcione como conducto mundial en esta materia. Creemos de forma firme que nuestra industria debería predicar con el ejemplo. 

En cualquier caso, siempre debemos considerar que nuestra industria no debería y no debe estar sobrecargada de burocracia al estar envuelta en diferentes normas y regulaciones. La Unión Europea debe ser más coherente y reconocer la realidad de la industria.

Actualmente se discuten muchos temas de sostenibilidad, y necesitamos llevar a cabo acciones más concretas para iniciar el cambio, salvaguardando al mismo tiempo el desarrollo de nuestro sector. Debemos evitar iniciativas y requisitos nacionales diferentes o contradictorios, que corren el riesgo de crear barreras comerciales y de innovación en el mercado interior europeo.

Desde una perspectiva interna de Eurovent, hemos forzado para que dentro de Eurovent se hagan reformas estructurales mayores, cosa que aún está en proceso, y que ya ha dado los primeros frutos. Nuestro Consejo de Administración comparte la ambición y la dedicación para reinventar las organizaciones, haciéndolas aún más eficientes, al tiempo que colabora estrechamente con sus miembros y participantes en la certificación. 

Es prioritario para nosotros que tanto la asociación como el organismo de certificación sirvan a sus clientes y al mercado, satisfaciendo las necesidades de la industria, definiendo objetivos, asegurando una toma rápida de las decisiones, e incrementando los niveles de actividad para alcanzar esos objetivos. 

Siguiendo con el Covid-19, muchos fabricantes se han tenido que adaptar y reinventarse, consolidarse y encontrar nuevas maneras de conducir su negocio. Nosotros, como industria, esperamos la misma flexibilidad y dinamismo por parte de nuestras asociaciones y organismos de certificación.

La Calidad del Aire Interior es actualmente el principal objetivo de todos los fabricantes para mejorar los equipos de climatización manteniendo una eficiencia energética y sostenibilidad de los mismos. ¿En este sentido cual es el papel de EUROVENT a nivel de los diferentes países asociados y la Comunidad Europea, en materia de normativas y legislación?

Eurovent representa a los fabricantes del sector HVACR, no a todo el sector de la construcción como conjunto. Y Eurovent es la mayor asociación en el área de la ventilación. 

Como Eurovent, defendemos constantemente la importancia de la calidad del aire interior, que está demostrado que contribuye a aumentar los niveles de productividad y la salud. Un buen aire interior permite a nuestros hijos aprender más y mejor, les ayuda a concentrarse y a permanecer atentos durante más tiempo en el horario escolar. También nos permite ser más productivos en el trabajo. 

La importancia de la calidad del aire interior es especialmente evidente desde el Covid-19, ya que una correcta ventilación es una de las medidas primarias para la mitigación del virus, junto con otras ya conocidas medidas de prevención como son: las mascarillas, la vacunación y la distancia social.

Como industria, proporcionamos los medios necesarios para conseguir un clima interior saludable mediante sistemas de ventilación de aire fresco y equilibrado. 

Eurovent está presionando, junto con otras asociaciones europeas, para reforzar la legislación en materia de calidad del aire interior de la Comisión Europea. El 15 de diciembre se ha publicado un nuevo borrador de la EPBD (Directiva de Eficiencia Energética de Edificios), en el que se han incluido dispositivos de monitorización y control de la calidad del aire interior como obligatorios para los nuevos edificios. Esto ya es un gran paso adelante.  Pero todavía tendremos que vivir con la realidad de encontrar diferentes normas legales en Europa, ya que la CAI seguirá siendo una competencia de la gobernanza nacional. Nuestro objetivo es llegar a un sistema de etiquetado para la CAI, al igual que existe para Ecodiseño.

El sector de la climatización y la refrigeración juegan un importante papel con respecto al cambio Climático. La interrelación con las diferentes asociaciones como AFEC y AEFYT existentes en los diferentes países asociados supone una importante coordinación. ¿Cómo ejercen desde EUROVENT esta interrelación?

El equipo de Eurovent mantiene un contacto regular y un intercambio de conocimientos eficientemente estructurado y sistematizado con las asociaciones nacionales, no sólo mediante reuniones de la Comisión (presenciales o telemáticas, según los tiempos dicten), sino también a través de su extranet, en la cual se comparte de forma segura información sobre grupos de trabajo de producto; documentación de trabajo en curso sobre foros consultivos; proyectos especiales de alcance transversal; novedades de la Unión Europea; bases de datos de legislación europea relevante para el sector HVACR, como por ejemplo textos normativos, preguntas frecuentes, evaluaciones de impacto, directrices, guías de recomendaciones, etc.

Esta coordinación entre las asociaciones nacionales a través de la Comisión y de la plataforma digital, facilita una vía comunicación fluida para exponer puntos de interés, compartir buenas prácticas y desarrollar redes de trabajo cooperativo y colaborativo.

La clasificación energética de los equipos sufrirá un cambio próximamente con la eliminación de los apéndices A+ a A3+. ¿Tienen previsto alguna acción concreta de apoyo a la divulgación de la nueva clasificación en coordinación con las diferentes asociaciones europeas de fabricantes?

En general, apoyamos como industria la actualización del sistema de etiquetado energético de la Unión Europea. Mantener el sistema anterior habría supuesto el riesgo de que las etiquetas energéticas se convirtieran en una mera pegatina, ya que básicamente todos los productos habrían recibido clases A o superiores, lo que puede confundir a los consumidores. 

Principalmente, estas etiquetas deben cumplir sus propósitos principales: Guiar a nuestros clientes a través de productos disponibles que cada vez son más eficientes y sostenibles. Esto también significa que las etiquetas deberían ser comprensibles y no estar llenas de mucha información técnica, que la mayoría de los usuarios finales no entienden. 

Seguimos manteniendo que los productos B2B no deberían recibir una etiqueta energética obligatoria. El mercado B2B funciona de forma diferente al B2C. En un entorno B2B, se tienen en cuenta muchos más factores y especificaciones técnicas de los que se podrían incluir en una etiqueta. En este caso, se correría el riesgo de crear una burocracia adicional sin ningún valor añadido real.

También consta entre sus objetivos una mayor interrelación con asociaciones similares de otros continentes. ¿Con cuales concretamente y que temas serían los abordados?

Este es un punto crítico de mi presidencia. La industria europea debe actuar mucho más como un rol global, cooperar proactivamente con otros continentes y sus asociaciones en el avance de sus programas de sostenibilidad en materia de climatización.

La mayor parte del mundo reconoce que no hay forma de evitar la sostenibilidad. El cambio climático es un hecho y, como importante consumidor de energía, nuestra industria debe cumplir su papel y su compromiso para mitigar sus consecuencias. La sostenibilidad no debe ser un instrumento de marketing, sino que debe ir seguida de acciones reales. 

Junto con nuestros socios de todo el mundo, debemos garantizar que la tecnología de alta eficiencia se convierta en la norma. Debemos reconocer que ciertos refrigerantes tienen un grave impacto en nuestro clima, lo que significa que las tecnologías alternativas deben impulsarse con más fuerza y rapidez.  En Europa, hemos marcado el ritmo mundial en las últimas décadas. 

Medidas como el diseño ecológico y el Reglamento sobre gases fluorados, por nombrar sólo algunas, han transformado el mercado. ¿Quién hubiera creído hace diez años que las tecnologías de motores EC serían la norma en 2022, por ejemplo? ¿Quién iba a pensar que hoy en día los supermercados pueden funcionar con refrigeración por CO₂ incluso en Oriente Medio?

El cambio es posible. Sin embargo, a menudo requiere un impulso como una legislación sólida y tecnológicamente neutra que establezca unos requisitos mínimos y permita a la industria desarrollar las mejores soluciones posibles.

Esto es exactamente en lo que nos gustaría centrarnos en nuestro trabajo internacional. Ya tenemos un capítulo bien establecido “Eurovent Middle East”, que está a punto de celebrar su quinto aniversario. Además, en 2021 creamos “Eurovent Internacional”, dedicada enteramente a la internacionalización. Su objetivo es apoyar a los mercados de todo el mundo a subir el listón para permitir una mejor tecnología HVAC. 

En 2021 realizamos la primera visita de una delegación a la India, en la que nos pusimos en contacto con las autoridades y las asociaciones locales, como ISHRAE. Nuestra misión es ofrecer consejos útiles basados en nuestras lecciones aprendidas. Estamos llevando a cabo iniciativas similares en América Latina, el norte de África y Rusia, y hay mucho más por hacer.

Cualquier organismo de HVAC interesado en apoyar este trabajo es más que bienvenido a unirse.

¿Qué otro reto tiene previsto llevar a cabo en beneficio del sector? ¿Están entre ellos la economía circular, la huella de carbono, el uso de nuevas metodologías, por ejemplo?

Además de lo que ya he mencionado, una cuestión fundamental es la digitalización. Las soluciones digitales, como los controles inteligentes y el BIM, son esenciales para seguir avanzando en cuestiones como la eficiencia energética, la calidad del aire interior y la economía circular. Nosotros, como industria, tenemos que abrirnos a una transformación significativa de nuestro sector. Como asociación, tenemos que considerar la posibilidad de ampliar nuestro ámbito de actuación para acoger a nuevos actores y nuevas ideas en nuestra industria. Al igual que en el ámbito de la sostenibilidad, nuestro sector debe ser un impulsor digital, no un seguidor. 

También en este caso son esenciales unas condiciones reglamentarias sólidas, del mismo modo que el diseño ecológico ha supuesto un impulso para llevar la eficiencia energética a niveles que entonces se consideraban inimaginables. 

En cuanto a la economía circular que ha mencionado, apoyamos plenamente esta vía como industria. Sin embargo, no puedo insistir lo suficiente en que esto requiere una solución europea y no un enfoque nacional. De lo contrario, lograríamos lo contrario de los objetivos al crear un mosaico de normas diferentes que obstaculizan la innovación, ya que los fabricantes invertirían la mayor parte de su tiempo en hacer frente a la burocracia. También pondría en riesgo los puestos de trabajo y supondría una carga para los agentes más pequeños que operan en el mercado, ya que solo los grandes podrían hacer frente a ella. Por tanto, economía circular: Sí. Pero debemos tener en cuenta la seguridad de la planificación, un enfoque europeo conjunto, la neutralidad tecnológica y la viabilidad. 

El número de empresas españolas del sector ha crecido al igual que la certificación de sus equipos. ¿Cree que en España estamos al mismo nivel de certificación que los otros países miembros de Eurovent?

El sector español de la climatización ha evolucionado mucho en las últimas décadas. Hoy en día, la voz española tiene un cierto peso en el sector HVAC europeo y en los mercados de exportación como América Latina y el norte de África. La fuerte alineación de asociaciones como AFEC y AEFYT, como miembros activos y de larga duración de Eurovent, ha jugado sin duda un papel positivo en este sentido.

La penetración de la Certificación Eurovent en el mercado español es alta, aunque aún no tanto como en otros países vecinos, donde es imprescindible tenerla. Un alto índice de solicitud de la Certificación Eurovent dentro de las especificaciones en España es un signo positivo. Contribuye a crear unas condiciones equitativas tanto para los fabricantes como para los usuarios finales.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que no todas las certificaciones son iguales. Eurovent Certita Certification está auditada por un organismo de control independiente. De este modo se asegura que el usuario final obtiene el rendimiento declarado por el fabricante.Y el procedimiento de certificación es muy extenso. Por ejemplo, en una unidad de tratamiento de aire (UTA), se verifica el software de selección, se miden en laboratorios externos las características técnicas tanto de la envolvente como de las prestaciones de la máquina, contrastándolas con los valores de la selección y además se realizan auditorías periódicas de la fábrica.

Los lectores también deberían recordar que un sistema de certificación de rendimiento como Eurovent certifica los valores de catálogo de los fabricantes. 

Esto significa que un producto de bajo rendimiento también puede ser certificado si las cifras son correctas. En consecuencia, los clientes deberían comprobar críticamente los valores proporcionados y verificar elementos como la etiqueta energética de Eurovent.

Por otro lado, a la hora de seleccionar un equipo en un proyecto, ¿tienen los prescriptores muy presente la certificación de los mismos?

Cada vez lo hacen más, sí. Y la mayor parte de la industria de HVACR lo fomenta. Nosotros, como industria, tenemos que asegurarnos de que las certificaciones sigan teniendo sentido. Tenemos que garantizar el valor y el potencial de diferenciación de un programa de certificación. 

Tenemos que exigir que los programas de certificación como Eurovent expliquen cómo contribuyen a la sostenibilidad. ¿En qué se diferencian? ¿Cómo pueden nuestros clientes distinguir los productos realmente sostenibles de los que sólo anuncian que lo son? Seamos todos un poco más exigentes.

¿Para AFEC supone alguna ventaja adicional que una empresa de su junta directiva sea presidente de Eurovent?

Al haber sido el representante de AFEC en la junta directiva de Eurovent durante muchos años, la colaboración entre AFEC y Eurovent es madura, cercana, abierta y tremendamente fructífera, y ha estado siempre muy valorada por ambas organizaciones. El hecho de ser ahora presidente de Eurovent podría verse como un valor añadido para AFEC, en el sentido de que se le da más visibilidad a la asociación y a España en el ámbito internacional.