Aquarea es la bomba de calor aire-agua de Panasonic que, gracias a su máxima eficiencia energética, se instala en proyectos de casas pasivas por su apoyo a la ventilación mecánica con recuperación de calor y la optimización de ganancias solares y calor interior, dos de los puntos más importantes en los requerimientos de un proyecto Passivhaus. La bomba de calor aire-agua está basada en la Aerotermia, una energía renovable reconocida por la Directiva Europea 2009/28/CR que utiliza una fuente de energía renovable y gratuita como es el aire exterior. En la mayoría de países europeos se está incentivando la instalación de la bomba de calor con el objetivo de reducir la factura energética y, consecuentemente, las emisiones de CO2.
Panasonic presentó también el sistema utilizado en una de las últimas promociones de grupo LOBE, el proyecto residencial de Basa de la Mora, en Miralbueno (Aragón), un edificio multifamiliar de 186 viviendas, todas ellas casas pasivas, con un consumo energético prácticamente nulo y con la certificación oficial Passivhaus y equipadas con el sistema Aquarea All-in-One de Panasonic. Con un diseño que ahorra en espacio, Aquarea All-in-One proporciona calefacción, refrigeración y agua caliente doméstica con una bomba de calor que es a penas más ancha que un armario de cocina.
Asimismo, en la feria Climatización 2019, Panasonic lanzó su gama Aquarea más eficiente hasta el momento, la nueva Aquarea Generación J, con nuevas características que aportan eficiencia energética, diseño y comodidad tanto para hogares como comercios. Posicionada como una solución altamente eficiente por utilizar el aire como fuente de energía renovable, Aquarea presenta, con la nueva generación J, una eficiencia para calentar aún mayor en comparación con la generación anterior y con un COP (Coeficiente de rendimiento en calefacción) de 5,33 en el modelo WH-UD03JE5 y un COP de Agua Caliente Sanitaria del 3,3.
Desde septiembre de 2019, los modelos contarán con la certificación energética A+++ cuando funcionan a baja temperatura, lo que supone la clase energética más alta, según la nueva directiva de calificación energética 2010/30/EC.