El Día Mundial del Clima, que se celebra el próximo domingo 26 de marzo, pone de manifiesto la urgencia de tomar medidas para enfrentar el cambio climático y proteger nuestro planeta. Mitsubishi Electric, en su compromiso con la sostenibilidad, conmemora esta efeméride recordando la importancia de proteger el medio ambiente promoviendo la calidad y el desarrollo sostenible a través de sus productos y tecnologías altamente eficientes, innovadoras y de ahorro de recursos y servicios con conciencia ambiental.
La firma japonesa se suma a esta celebración haciendo un llamamiento a la concienciación social y mostrando algunas de sus tecnologías punteras, exclusivas y pioneras en el uso de energías renovables que contribuyen a reducir las emisiones de CO2 y promueven el mayor ahorro energético hacía una sociedad más sostenible. Como ejemplo, Mitsubishi Electric promueve soluciones que cuentan con la máxima clasificación energética (A+++), como su serie MSZ-LN Kirigamine Style, tecnología que ofrece aire acondicionado, calefacción gracias a su bomba de calor, y la mejor calidad de aire interior en uno de los sistemas más eficientes del mercado. Su funcionamiento no genera emisiones de CO2 y gracias a su tecnología 3D I-see Sensor y su sistema MELCloud ofrece control wifi que permite ajustar la temperatura y controlar el consumo del dispositivo a través de un smartphone.
Todo ello sin olvidarnos de ECODAN, que utiliza como fuente de energía renovable la AEROTERMIA, necesitando solo un 20% del suministro eléctrico para calentar el hogar, ya que el 80% restante proviene del aire exterior. Una solución que no solo conlleva un ahorro en la factura energética del 80%, sino la utilización de un sistema sostenible que promueve la ecología, eficiencia y ahorro de las emisiones de CO2.
Además, la apuesta de Mitsubishi Electric por la sostenibilidad queda reflejada en su “Declaración de Sostenibilidad Ambiental 2050” y su lema Changes for the Better “Cambios para Mejorar”, que recoge iniciativas concretas de la compañía en todas sus áreas de negocio y objetivos a largo plazo para contribuir positivamente en el entorno. Entre ellas se encuentran, hacer que la energía sea accesible y limpia para todos, crear ciudades y comunidades sostenibles, llevar a cabo medidas para frenar el cambio climático; y todo ello, con una mayor inversión en I+D+I como máximo exponente en el desarrollo de nuevas tecnologías que contribuyan a una transición energética.