La ventilación en general y la calidad del aire en especial están de actualidad. Ambos conceptos son ahora de vital importancia y han dejado de tener papeles secundarios en los nuevos proyectos, así como en instalaciones ya existentes
Estos últimos años, la conciencia de las empresas, administraciones y particulares sobre la necesidad de contar con sistemas de ventilación mecánica ha aumentado.
Los hábitos de la gran mayoría de la población, que vive en grandes ciudades y pasa mucho tiempo en espacios interiores, junto con la subida gradual de las temperaturas, hacen insuficiente e inviable depender únicamente de la ventilación natural.
El interés por la calidad del aire también se ha disparado. La contaminación, pero sobre todo la pandemia, han despertado la preocupación por el aire que respiramos y sus efectos directos a nuestra salud. Por este motivo, el control de la calidad del aire y la filtración son ahora puntos principales en el orden del día.
En Morgui Clima tenemos más de 25 años de experiencia en el sector de la ventilación industrial, con una gran especialización en el sector de la hostelería y la automatización de edificios. Diseñamos proyectos de ventilación y extracción de humos para crear espacios saludables y confortables, eficientes y de fácil mantenimiento.
CALIDAD DEL AIRE
Para conseguir ambientes seguros es esencial que exista una renovación del aire, es decir, una impulsión de aire exterior y una extracción del aire viciado. Por consiguiente, es determinante disponer de un sistema de ventilación forzada bien dimensionado y calculado que aporte el caudal necesario para garantizar una calidad del aire según las normativas vigentes.
La legislación actual en ventilación y calidad del aire se resume principalmente en el Código Técnico de la Edificación (CTE) y el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE). En el primer caso, se hace referencia a viviendas particulares y garajes, y en el segundo caso, al resto de locales y edificios.
El RITE hace suya la norma EN 13779 y clasifica en 4 categorías la calidad del aire interior (IDA), siendo IDA 1 la óptima e IDA 4 la de calidad más baja. También establece los métodos para fijar el caudal mínimo de aire necesario para alcanzar los diferentes niveles de calidad del aire, como se muestra en la tabla de abajo.
CONTROL Y AUTOMATIZACIÓN
El control y la automatización de la calidad del aire es básico para poder actuar debidamente en la calidad del aire en espacios interiores. Además, permite hacer un uso eficiente de las instalaciones. El RITE dispone 6 tipologías posibles de control de la calidad del aire. La opción más completa y sofisticada es la IDA-C6, que consiste en el control mediante sensores que miden parámetros de calidad del aire interior (CO2 o VOC).
Esta elección se emplea para locales de ocupación variable, como teatros, cines, salones de actos, aulas, recintos para el deporte y similares.
Con la marca finlandesa Produal, hemos introducido en España un nuevo transmisor de calidad del aire multiparámetro llamado SIRO.
Estos nuevos equipos incorporan la medición de temperatura y humedad + PM1/PM2.5/PM10 o la combinación con CO2 y VOC. Funcionan con la recomendada tecnología de infrarrojos NDIR y su protocolo de comunicación es Modbus. Además, son muy útiles para obtener las certificaciones tipo LEED®, BREEAM®, RESET® o VERDE®.
Este 2022, ya se han instalado exitosamente en más de 20 grandes establecimientos del sector retail en nuestro país.
FILTRACIÓN
Toda instalación diseñada para la renovación de aire tiene que ir acompañada de una correcta filtración. Esto nos permite asegurar un aire limpio y saludable en los espacios cerrados.
Juntamente con las clasificaciones del aire interior IDA, también existen las que se refieren al aire exterior no tratado, denominadas ODA. Con estas dos variables, la calidad del aire interior y exterior, se determinan las clases de filtración aconsejables para obtener dichos niveles de calidad del aire. Las normativas EN 779 e ISO 16890 jerarquizan los filtros conforme a su eficacia de filtración de partículas gruesas (G1-G4), medias (M5-M6) y finas (F7-F9).
Después, en un estadio superior, encontramos los filtros de alta eficiencia, EPA, HEPA y ULPA regulados por la normativa EN 1822.
De forma recurrente, todavía, muchas instalaciones de ventilación no cuentan con ningún sistema de filtración. Aunque sea una parte fundamental de la renovación de aire, fácilmente se la descarta por no aumentar costes.
En Morgui Clima hemos diseñado el equipo de filtración Kitchen Neat Air (KNA) pensado para aportaciones de aire de distintas capacidades (m³/h). Es un equipo que incorpora diferentes etapas de filtración y se instala en la impulsión de aire, justo antes de la caja de ventilación. Ofrece una eficacia de filtración media gracias a la combinación de un filtro G4 y un filtro F7.
EL KNA brinda una filtración asequible para todos los presupuestos y proyectos con el fin de garantizar ambientes saludables y seguros a las personas.
Si somos exigentes y el presupuesto lo permite, es muy recomendable y especialmente en el sector de la hostelería, instalar equipos de filtración en las extracciones de humos. De la misma manera que es importante mantener un aire saludable en el interior, también debemos filtrar el aire que se expulsa al exterior.
En este sentido, dos opciones para contemplar seriamente son los equipos electroestáticos, que son muy eficaces y eficientes, o los equipos de filtración con carbón activo, que ayudan considerablemente a reducir la intensidad de los olores.
En definitiva, la ventilación siempre está presente y debe estarlo, aunque no se vea a simple vista. Diseñar instalaciones bien dimensionadas con cálculos estudiados y cumpliendo normativas es la base de todo proyecto. Incorporar filtración y la automatización de control con productos de calidad nos proporciona seguridad, confort, bienestar y salud. Con una óptima calidad del aire mejoramos la calidad de vida de las personas.
